Hidratación: Todo lo que necesitas saber
El agua es uno de los pocos recursos sin el cual ningún ser vivo podría existir, su importancia y beneficios la convierten en un elemento crucial en funciones metabólicas del cuerpo. El día de hoy te mostraremos su importancia al momento de entrenar y los beneficios que contribuye al cuerpo.
El agua un recurso natural que necesitan todas las personas para mantener un buen estado de salud. Esto incluye nuestra composición corporal, concentración mental, sueño y renovación. Es evidente que el agua es un elemento clave para la vida y es fundamental para nuestra supervivencia. El cerebro humano se compone en un 95% de agua, los pulmones en un 90%, la sangre en un 83%, los músculos en un 76% y los huesos en un 22%. Estos porcentajes nos demuestran la importancia del H2O en nuestro cuerpo para mantener un buen estado de salud. Sin embargo, la mayoría de las personas no consumen la cantidad de agua diaria recomendada. A pesar de que mucha gente es consciente de los beneficios que el agua comporta a la salud, muchas no llegan a los ocho vasos de agua al día, causando un incremento alarmante del número de individuos deshidratados.
Para poder hidratar el cuerpo, es necesario consumir agua; pero también otros alimentos, como la fruta, la verdura o las bebidas, las cuales aportan el agua que necesitamos. Sigue estos 6 consejos para que puedas hidratarte de forma correcta.
Beber abundante agua. Ya hemos visto que el cuerpo humano está principalmente compuesto de agua, que pierde fácilmente con el sudor y la orina. Por ello tenemos que reponerla para mantenernos hidratados y en buena forma. La cantidad que deberíamos consumir de agua para el buen funcionamiento del organismo sería un mínimo de dos litros de agua diarios.
Evitar el alcohol. Las bebidas alcohólicas causan deshidratación ya que tienen efecto diurético.
Consumir alimentos con agua. Beber agua no es la única forma de hidratarnos. También podemos proveer agua a nuestro cuerpo a través de frutas y vegetales.
Tomar variedad de bebidas: además de agua, beber infusiones, refrescos, zumos, lácteos, bebidas vegetales, etc.
Evitar la cafeína. También el consumo de café, té y refrescos puede resecar el organismo.
Evitar la sal. A parte de provocar mucha sed, el exceso de sal puede provocar hipertensión y problemas cardíacos.
¿Qué efectos puede tener la deshidratación en el cuerpo?
Cuando estamos deshidratados, el nivel de agua que contiene nuestra sangre disminuye lo que dificulta su circulación y como consecuencia nuestros órganos y músculos reciben un nivel menor de los nutrientes y del oxígeno que necesitan para funcionar correctamente.
Así pues, cuánta más agua pierda nuestro organismo, más graves serán las consecuencias para nuestra salud:
Una deshidratación leve nos provocará sed, dolores de cabeza, debilidad, mareos, fatiga y también puede producir somnolencia.
Si la deshidratación que padecemos es moderada tendremos la boca seca, nuestro pulso aumentará, a nuestra piel le faltará elasticidad, nos sentiremos pesados y tendremos poco o ningún volumen de orina.
En caso de deshidratación grave hay que acudir a un centro sanitario ya que estaremos ante una emergencia médica que podría ser letal: se caracteriza por una sensación extrema de sed, una frecuencia respiratoria acelerada, una falta de volumen de orina, piel fría y húmeda, espasmos musculares, vómitos, alteración del estado mental.
Así que debemos aprender a escuchar el cuerpo cuando pide agua, a entender que la sensación de sed es la forma que tiene de pedirnos líquido, que el agua es el principal elemento que compone nuestro organismo, y que sus pérdidas constantes debido a las funciones vitales, hace que debamos reponerla de manera efectiva. Mantener un nivel de hidratación adecuado es imprescindible para la supervivencia, la salud, el rendimiento físico y mental. Y recordad: ingerid agua incluso sin tener sed.